La limpieza de la férula dental paso a paso

¿Sabes cómo se limpia la férula dental? Si no es así, no te preocupes. Desde Clínica Fray Luis de León te brindamos los consejos necesarios para mantener tu férula libre de restos de comida y bacterias para alargar su vida útil. Así deberás limpiarla después de cada uso. ¡Lee con atención! 

• Enjuague inmediato. El primer paso es realizar un primer enjuague nada más retirar la férula de la boca. Así evitarás la proliferación de bacterias o que los restos de saliva comiencen a generar malos olores. 
• Usa un cepillo suave (y diferente). No basta con utilizar el mismo cepillo con el que limpias los dientes. Te recomendamos contar con otro exclusivamente para la limpieza de la férula o aparato dental transparente. Debe ser de cerdas suaves porque las cerdas con alta dureza pueden rallar o dañar la férula. 
• No la frotes con pasta de dientes. Los componentes abrasivos que contiene la pasta, así como otros productos de limpieza también prohibidos en la limpieza de férulas, dañan notablemente estos aparatos. Esto provoca un deterioro más rápido y que, por tanto, se reduzca su vida útil. El consejo es utilizar, al menos cada tres o cuatro días, jabón neutro al momento del cepillado. 
• Agua tibia, no caliente. Parece que limpieza, desinfección y agua muy caliente van de la mano, ¿verdad? Este caso no es así. Si enjuagas la férula con agua muy caliente, podría sufrir malformaciones y podría provocar que la dentadura no se ajustara correctamente. Deberás enjuagar únicamente con agua tibia. 
• Seca y guarda en su estuche. El consejo es dejar la férula durante 15-20 minutos sobre una superficie plana y seca para, ya sin restos de humedad, introducirla en un estuche con ventilación. Para evitar la proliferación de bacterias… ¡nada de guardarla entre una servilleta ni dejarla por cualquier lado!

Más consejos ‘extra’

Si la limpieza de la férula es importante, no lo es menos la limpieza de su estuche. Límpialo al menos una vez por semana con lavavajillas convencional y asegúrate de que no contenga restos de humedad en el momento de volver a usarla. 

Además, cada semana, es recomendable usar un limpiador específico para prótesis. Los más comunes con unas pastillas efervescentes que se disuelven en un vaso con agua siguiendo las instrucciones para, a continuación, depositar la férula en el interior del vaso durante 15-20 minutos. 

Recuerda que las férulas terminan dañándose, pero si la limpias y cuidas debidamente, alargarás su tiempo de uso. 

¿Sigues con dudas? En Clínica Fray Luis de León estamos siempre atentos a tus consultas o necesidades. 

¡No dudes y contáctanos!

Imagen: Canva