La pulpotomía para ‘salvar’ dientes de leche

¿Sabes en qué consiste la pulpotomía? Es un tratamiento que realizamos en el equipo odontológico de clínica dental Fray Luis de León cuando nos encontramos con dientes de leche cuya pulpa (parte interna del diente) está notablemente infectada. Te lo contamos todo sobre ella ;)

De entrada, debemos saber que la pulpa de un diente está formada por nervios, tejidos y vasos sanguíneos. Su nombre no es casualidad porque, como en las frutas, se trata de un tejido blando e interno que, por diferentes motivos, puede verse comprometido generando dolor. 

Pero, ¿por qué se daña la pulpa dental? Suele ser consecuencia de caries u otras enfermedades dentales consecuencia de malos hábitos de higiene, como es el caso de las roturas o fisuras de la pieza dental. 

En esos casos, cuando el daño es leve, el odontólogo puede optar y proponer una pulpotomía; tratamiento bastante común en niños (recordemos, se interviene con dientes de leche) con la finalidad de ‘salvar’ la pieza hasta el momento en el que el diente definitivo esté listo para erupcionar. Es decir, es un esfuerzo por facilitar que los dientes permanentes salgan de forma correcta para, ante la infección presente, no tener que optar por eliminar directamente la pieza. 

Síntomas principales 

La caries profunda suele ser el motivo principal de infección. Por eso, entre los síntomas que deben presentarse están el cambio de color del diente, la sensibilidad dental, la inflamación de la encía, un dolor fuerte, el mal aliento o la rotura de la pieza. 

Si el odontólogo, tras un diagnóstico exhaustivo, propone una pulpotomía debes saber que se trata de un procedimiento meticuloso. Para minimizar la incomodidad del niño y evitar el dolor, se realiza aplicando anestesia local para adormecer la zona y permitir acceder a la zona infectada con acierto y precisión. 

Esto se hace mediante una pequeña abertura en la corona del diente para, después, eliminar la parte de la pulpa que está dañada. Es decir, no se elimina la pulpa en su totalidad, sino que se preserva toda la parte saludable para que la vitalidad del diente no se pierda y pueda seguir cumpliendo su cometido. 

Después, tras desinfectar por completo la zona y asegurar que no hay más bacterias en el interior, se trata de sellar el diente y restaurarlo. Cuando el daño ha sido extenso también se puede proponer la colocación de una corona dental que proteja y fortalezca la pieza dental. 

Hay que indicar, por último, que existe un tratamiento cuyo nombre es muy similar pero que, en su ejecución, se utiliza para situaciones diferentes. Hablamos de la pulpectomía que, ante casos de infección de la pulpa, se realiza en dientes definitivos cuando la pulpa debe extraerse por completo al estar dañada en su totalidad. 

Como siempre, desde Clínica Dental Fray Luis de León te recomendamos estar muy alerta a los síntomas y solicitar cita y valoración experta lo antes posible. Todo con el objetivo de no perder ninguna pieza dental. 

Te atenderemos encantados. ¡Aquí estamos!